Primer lunes del mes del mes de octubre, 17:33 hora de Madrid y del resto de España con excepción de las volcánicas Canarias.
Como cada lunes, Juanito va a empezar a recibir pedidos para servir durante toda la semana.
La verdad, es que para su empresa el COVID, ha sido un gran impulso. Durante el confinamiento, puso en marcha un sistema de recepción de pedidos vía WhatsApp Business, que luego ha perfeccionado y prácticamente el 90 % de sus ventas se canalizan por dicho medio.
Tiene una aplicación a medida a tal efecto, que además le permite coordinar el reparto con su equipo. Pero de repente, estalla la tragedia oeh oeh oeh:
- ¡¡WhatsApp se ha caído¡¡
- ¿Cómorrrr?
- Si, si que ¡¡WHATSAPP SE HA CAÍDO¡¡
Juantio mira impaciente como la página de su CRM que conecta de manera automática con la aplicación de mensajería:
- ¡¡ NADA ¡¡ no recibe ningún mensaje.
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Con cierto nerviosismo, coge su móvil y trata de actualizar la aplicación deslizando hacia abajo, En la parte superior, observa un intento de actualización en forma de ruletita, pero “que si quieres arroz Catalina”.
- Josefita, tú que tienes Android ¿tampoco te funciona WhatsApp?
- No que va, se ha caído a nivel mundial.
Una sensación de vacío le embarga.
- ¿Qué cojones hago yo ahora?
Se pone a cotillear en Twitter, luego a navegar sin sentido, después se mete en YouTube, comienza viendo vídeos sobre como mejorar su brazada de crol y termina viendo a Maldini explica el último “cagancho” del Real Madrid.
Ha pasado casi una hora y la aplicación de logo verde, sigue igual. Se recuesta en su silla, viendo un vídeo del volcán de la Palma desde un dron, pero su cabeza en otro lado.
Comienzan las llamadas a su equipo. Eso le lleva casi otra hora. Hora que pasa “sin vender una escoba”. Y Juanito, como si fuera el Curro el Palmo, se muerde los labios y calla, no porque no hiciera la mili por no dar la talla, si no por no liarse a echar dioses.
10.000 euros en ventas que es lo que suele hacer un lunes de primeros de mes, que ha perdido como perdió a su abuela.
Manda a la gente a casa, con la esperanza de que mañana además de salir el sol y salga WhatsApp.
Y tu ¿tienes tu empresa montada en un sistema del que no tienes el control? ¿Qué pasaría sí….?
Que la fuerza te acompañe.
