La revista Time, ha nombrado como personaje del año a “El indignado”.  Curioso personaje, que ha saltado en este 2011 a la palestra, para sustituir en tan insigne portada, a gentes tan dispares como: Vladimir Putin, Franklin Delano Rooselvelt, Barack Obama, Vladimir Putin, Mijail Gorbachov, Joseph Vissarinovich Stalin (en dos años) o el mismísimo Adolf Hitler.


No obstante, me gustaría entrar en detalla, más que, sobre quienes son o han sido objeto, de merecer o dermerecer su aparición en la mencionada portada. Sobre el personaje en sí, sobre el indignado, puesto que este personaje también es muy dispar y está sometido a múltiples clases y condiciones. Pudiéndose observar, además de los de verdad, de los que salen en las “manis” y concentraciones,   a los siguientes “indignatipos”:


Indignado Electoral: Dícese de todo español, que al llegar la hora de votar, observa que casi ninguna fuerza (o debilidad) política, le representan. Que él demás tiene, con llegar a fin de mes pagando: la hipoteca, las letras del coche, las 15 actividades extraescolares y el comedor escolar de sus hijos, la comunidad, la basura, las comisiones con que le sablea el banco (ya no hay cajas), el gimnasio suyo y las clases de pilates de su mujer, la contribución, el alcantarillado, los canalones, las fiestas de su pueblo, los seguros del coche,  de la casa y del perro y las cenas el primer viernes después de cobrar la extra con sus amigos (hace 6 meses que no puede salir de cañas). Que primero dejó de fumar, en casa, luego en los bares y ya por la calle (porque no puede pagar el tabaco) y además ha de aguantar a los suegros cada quince días y ver como su mujer le regaña porque le ha subido el colesterol y porque cada día tiene más barriga y menos pelo, con el agravante que no le deja nunca cumplir con la máxima que dice: “sexo y cerveza fría, al menos una vez al día”.


Indignado Deportivo: Dícese del  español, de toda clase y condición al que no le gusta el fútbol. Así mismo y como segunda definición, dícese del español, de toda  clase y condición al que le gusta el fútbol y  es del Real Madrid y está hasta las narices de que siempre nos gane el Barça, que encima nos dé un chorreo, teniendo a un  bobito en el banquillo, achancándolo a la suerte. Este español, está pendiente de que estalle la burbuja futbolística, para que el ZP del Madrid (FP), deje el club como un solar, con la prima de riesgo por las nubes, para que el Baryern Munich venga a rescatarlo.  Como tercer definición, venían antes los españoles, de toda clase y condición a los que les gustaba (ya no) el fútbol y eran (ya no) sufridores del Atlético de Madrid.


Indignado Judicial: Dícese del español, de toda clase y condición, que observa como algún individuo, muy bien trajeado (eso sí), se dirige en actitud chulesca y desafiante a todo el tiene por delante durante un juicio, sin temor ni pudor a desacato, puesto que  al fin y al cabo es una persona, que quiere a la gente “un huevo”. Así mismo dícese del español, de toda clase y condición, que creía que las gasolineras, eran sitios para repostar combustible o en su defecto comprar el pan o las revistas y para “campeonar”.


Indignado Judicial-ex Real: Dícese del español, de toda clase y condición, que observa, después de dedicar la mitad de su vida al deporte y la otra mitad a diversas organizaciones, (en las que ha trabajado, por el buen nombre de su esposa y del padre de esta), que su suegro le deja de hablar por su conducta definiéndola como poco ejemplar. Para poder rematar la definición, quedamos a la espera de como se resuelve judicialmente la cuestión, pudiendo quedar en Inocencia-ex Real o en “Caraduradelaño”-ex Real.

Es posible que sigamos repasando en próximos días más “indignatipos”, mientras espero que si no os acompaña la suerte el próximo día 22, al menos la haga la salud y claro la fuerza también. Que la fuerza os acompañe.