💣 Imagínate la escena, Napoleón Bonaparte casca en la isla de Santa Elena.
‼️ Su médico, al que insultaba e incluso escupía respira aliviado, cuando el ex emperador deja de respirar.
🌀 Y como la venganza es un plato que se sirve frío, cuando le hace la autopsia, le extirpa tres cosas:
✅ 1.- El corazón, por orden del propio Napoleón que quería que se lo mandaran a su esposa. ¿Romanticismo?
✅ 2.- El estómago, porque tenía algún padecimiento u úlcera y dijo que para su estudio.
✅ 3.- El pene, porque sí, sin más.
💥 O más bien, el órgano tres por venganza.
👀 El médico sabía que había padecido una rara enfermedad y que el tal Bonaparte, tenía cierto complejo, puesto que apenas medía 4 centímetros.
💣 Y tu dirás ¿qué nos enseña esto en el mundo de la empresa?
Napoleón foto OK Diario
🌈 Pues que siempre debes tratar a los demás, con educación y como te gustaría que te trataran a ti. Ya sean clientes, proveedores o trabajadores.
🎯 Estamos en un mundo, que cuanto más se digitaliza, aunque parezca que más se deshumaniza, realmente, más importancia cobran las relaciones “human to human”, esto es de persona a persona.
👀 La empresa que no entienda esto, que piense que puede tratar exquisitamente a sus clientes, pero maltratar a sus trabajadores o exprimir a sus proveedores, está condenada no a que les corten el… quien sabe qué.
💥 Que la fuerza te acompañe.
PD: Por estudios posteriores realizados al susodicho aparato, se estima que alcanzaba un máximo de 6,5 centímetros en erección.
PD2: Más de 85.000 dólares rechazó en 2.021 Eva Lattimer dueña del “napoleónico miembro”. Su padre lo adquirió por 3.000 dólares en 1969.
PD3: El corazón se extravió y nunca llegó a la viuda.
PD4: ¿Qué opinaría la viuda de aquello de que el tamaño importa?
PD5: Aunque lo aquí expuesto te pueda parecer surrealista, es todo cierto y está perfectamente documentado.